domingo, 26 de junio de 2011

martes, 21 de junio de 2011

Amor-on

Es imposible no reconocer que pensarlo me hace querer 'tenerlo'. ¿Tenerlo? Si, no. No, definitivamene no.
Verlo el viernes me provocó un ramillete de sensaciones varias. Esas ganas terribles de gritarle, pegarle; ganas de odiarlo más, quererlo menos. Y a la vez, esa necesidad de abrazarlo y decirle: Che, estoy, soy. No te preocupes.
Pregunta va, pregunta viene y esos ojos clavándose en los mios, expectantes. Exigiendo explicaciones, deshaciendome en excusas. El tiempo no había pasado. Y sin embargo, yo no quería estar ahí y El quería.. Y El quería qué? Quedarse?
Como, más de una vez, hablé con E: siempre hay alguien que te hace perder la cabeza. Alguien que conoce todos tus puntos débiles y se transforma en un uno más; a veces incluso en el peor de ellos. Siempre hay alguien por el cuál arreglarías todo. Correrías horarios, acortarías siestas; simplemente para verlo 10 minutos más y escucharlo decir las mismas cosas over and over.
Pero no, me rehuso a ser tan predecible.
Transformarlo en mi punto débil es aceptar que nuestro vínculo era enfermo (y que lo sigue siendo). Es entender que no aprendí, ni construí nada con Él. Es seguir colgada de un no se qué; que me llevaría a un no sé dónde, donde lo único que tengo claro es que, aún en los mejores días, no la paso bien y lo extraño.
No quiero que mi único recuerdo sea que me arruinó. No. Quiero recuerdos, no más. No quiero fantasmas, ni cuentas pendientes, ni historias por cerrar. Quiero, y me merezco, empezar de nuevo.
Pongo música mientras Él habla y habla y habla, "un beso nunca viene mal y más si es en el placard, después nos olvidamos de todo lo que pasó. Podríamos acurrucarnos, dormir la siesta abrazados" Silencio, mirada cómplice, risas y un: Se termino todo, pero como te extraño putita. "me duele verte, me encanta verte" Risas y: No digas pelotudeces.
Pero sabes qué? Extrañame, forrito, que a veces te pienso también; y al fin y al cabo, esto es lo mejor que nos pudo haber quedado after all.

domingo, 19 de junio de 2011

Esto que soy.

Esto que ves,
Y un país de las maravillas.
Y un mar de dudas.
Y un río de certezas.
Y otro mar, de agua.
Y unos puntos suspensivos.
Y un ramo de recuerdos.
Y un corazón con agujeritos.
Y un café.
Y un libro sin terminar.
Y un si.
Y un no.
Y una flor marchita adentro de un libro.
Y una tarde bajo el sol.
Y una sonrisa, casi sonrisa.
Y un brindis o ¡Chin chin!
Y un espejo.
Y una memoria (demasiado memoriosa a veces) .
Y una mujer (que intenta ser persona) .
Y un par de zapatos, gastados de tanto andar.
Y una declaración ... de intenciones y atenciones.
Y una espada (de madera) .
Y un delirio.
Y más de una lágrima pérdida.
Y más de una guardada.
Y un cuento de princesas y caballeros.
Y un suspiro ... con vocación de eternidad.
Y un tatuaje mental (o varios) .
Y una analogía.
Y un bla, bla, bla.
Y un vestido.
Y un trago.
Y un cigarrillo por vos.
Y otro sin vos.
Y un cuaderno casi sin hojas.
Y una historia de amor.
Y un arco iris.
Y un té humeante.
Y una tarde de lluvia en casa.
Y otra tarde dejándose llover en la calle.
Y un micromundo de macrosentimientos.
Y cosas, cosas en común con vos y con la gente.
Y un árbol.
Y un caramelo de miel.
Y un mar, con arena, con olas y con sol.
Y un azul.
Y un rosa y un verde.
Y un refugio.
Y una caminata descalza.
Y un montón de papelitos, papelotes y papelones.
Y una esperanza.
Y un ayer.
Y un hoy.
¿Y un mañana?
Y, aunque de forma incompleta, esto que ves y que te cuento... soy yo.
Y así, con muchos defectos y algunas virtudes.
Y así, tan fuerte a veces y tan débil otras.
Y así, tan dependiente de importarte.
Tan infantil que lleno hojas con tu nombre.
Tan orgullosa que me niego a aceptarlo.
Tan enamoradiza que, algunas noches, te creo mi todo.
Tan tonta que te lo explico.
Tan yo que ya no busco más excusas, que simplemente te elijo.
Tan yo que voy a proponerte un juego. Tenes que mirarme a los ojos. No, mejor, tenes que cerrarlos. Ahora te voy a hacer una pregunta, pero no es necesario que respondas. Yo voy a entender, por la expresión de tu cara, la respuesta. Perfecto: ¿estamos listos?

lunes, 13 de junio de 2011

¡Bienvenido a bordo!

Lo miras y sentis que lo conoces hace años. Juegan, hablan y te besa  y miles de maripositas se posan sobre tu piel y el tiempo se para. El tiempo no rueda; ni hacia adelante, ni hacia atrás, y te encanta, te gusta, te vuela la cabeza.
Haces que su mundo cambie de color cada vez que estás ahí. ¿Y el tuyo? El tuyo se desdibuja y contornea over and over cuando está cerca. Todo es azul, porque el azul es profundo, es ancho, grande, largo. El azul es mar. El azul es cielo; y también es verde, porque verde es vida y es libertad. Y somos un mar profundo y grande; y un bosque, frondoso, ancho, VIVO,
-Me parece todo tan irreal
-A mi no, a mi me parece todo demasiado real. Es lo que elijo, para qué desperdiciar la oportunidad? La oportunidad de tener a alguien adelante que le pasa lo mismo que a vos, que quiere lo mismo.Va
-No corramos - Dame tiempo - Teneme paciencia. 
-Vales la pena. Y te dice cosas así, su princesa y vos morís de amor, porque como bien asumiste una vez: Los hombres me entran, además de por los ojos, por los oídos. Y me dice cosas lindas, me dice cosas reales. Me dice. Me canta. Me cuenta. ME ENCANTA.

jueves, 2 de junio de 2011

Punto Final.

Ni san ni sa ni brisa ya
corren mi nube de algodón.
Ni los, ni nos, ni vos ni yo
debemos cargar esta cruz.

Comprender, aceptar.
Hicimos nuestro camino al caminar,
y hoy decidimos frenar acá
no vamos al mismo lugar.
Traté de hacer a mi bien tu bien,
y ves bien que me salio mal.
No acostumbro a fracasar.

Dijiste hasta acá ya fue me voy,
mi vida no está junto a vos.
Ya me canse que te de igual
si soy feliz o no lo soy.

Comprender, aceptar.
Parecía tan fácil como sumar
tu amor y mi lealtad
mi ternura y tu amistad.

A veces Marte y Venus se llevan mal.
No es cuestión de maldad.
Es duro aprender a amar.
Y acá estoy despidiéndome,
mascando tu rencor, lo sé.

No me quedo más que aceptar,
soy tan culpable como vos.
Yo también deje de regar
la flor de la superación.

Comprender, aceptar.
Prometiste cuidarme sin importar
y hoy ya no importa mi bienestar,
lo importante es tu ansiedad.
Regió mi vida al azar una vez ¿sabés?
No me gusta apostar,
siempre me tocó pagar.

Yo me propuse superar tu ausencia
a pesar del dolor.
Vos preferís no analizar,
seguís en busca del amor.

Comprender, aceptar
Por más gotas de sal que le robe al mar,
por más flores que un rosal.
Hoy nos toca despegar.
Por más gritos de paz, por más soledad
Que hoy castigue mi voluntad.
Por los dos ya no va más.

Y acá estoy despidiéndome
Mascando tu rencor, lo sé.
Estoy confiando que el tiempo nos dirá qué hacer.
Y acá estoy despidiéndome mascando tu rencor, lo se
Estoy confiando que el tiempo nos dirá que asi estuvo bien.
 
 
 
 
 
(Y esto es lo último que le dedico y éste tren se fue de la estación...)