Ñam, ñam, ñam.

¿Cómo no querer comermelo a besos todo el tiempo?

Quedate donde estás.

No debiste volver. Ya yo te olvidé, tu amor es cosa de ayer.

Tengo un novio.

Tengo un novio que no sabe el orden de los anillos; no entiende que va primero el solitario, después la alianza y por último el acompañante. Un novio que dice que Él va a comprar un solo anillo, la alianza. Pero también es un novio que sabe con cuantas cucharadas de nesquik hacerme la choco y cuantas de azúcar ponerle al té. Un novio que se acuerda nuestra canción y que tenía puesto en nuestra primera cita.
Es un novio que me dice que rico huele mi pelo cuando lo tengo lindo y que se acuerda el perfume que usaba en nuestras primeras salidas. Tengo un novio que sabe que decirme siempre.
Un novio que no es perfecto, ni ahí, pero sabe cuando necesito una merienda chocolatosa y como convencerme de irme a dormir. Un novio que sabe abrazarme cuando estoy loca y darme aire cuando estoy afixiada. Uno que lee mis producciones de la facu y me enseña a jugar a los jueguitos.
Tengo un novio que me hace acordar de las cosas importantes que me olvido. Un novio que dice que soy la más linda de todas y el amor de su vida.
Tengo un novio que dice que se quiere casar conmigo como tres veces y que es el mejor doctor cura mañas y caprichitos; y que importa entonces ser perfecto o saber que va primero el solitario, después la alianza y por último el acompañante.

Enferma (Vol. 4582)

¡Qué mal que me caigo a veces!

 Y ese puto vacío existencial que siento cada vez que sumo una nueva a mi haber.

Amor r r r.

- Contenta.
- Ansiosa.
- Acelerada.
- Llena-de-mariposas.
- Borracha-de-amor.

Love is the air.

Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui.  Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui. Luz y Luqui.
Tengo hojas y hojas y hojas llenas de Luz y Luqui's de colores, de diferentes tamaños, en diferentes papeles. Tengo esa ansiedad y esas mariposas de los primeros meses. Y unas ganas locas de salir de esta rutina asesina y de los ratos grises y aburridos.

Ataques vol.2

Ataques de amor correspondidos.

Ataques de besos, abrazos y dulce de leche.

Ataques.

Tener ataques de mucho amor y muchas ganas de abrazarlo y estrujarlo; y que Él tenga ataques de no tanto amor y no tener a quién abrazar, ni a quién estrujar. Y tener ganas de llorar, mucho y fuerte y estar en el trabajo y no poder. Y al final no poder ni abrazar, ni estrujar, ni amar; pero tampoco llorar, ni reir, ni nada.

Así de complicada.

Cuando empiezo a sospechar que alguien está dejando de quererme empiezo a buscarle defectos así, para cuando la otra persona dejó de quererme del todo, yo ya la odio por completo. Muy maduro, muy racional.

Reto.

Anoche: "Vos sos una princesa rosa y yo un príncipe azul".
Inventale un final feliz, ¿te animás?

El regreso de los muertos vivos. Vol. Mil.

Muertos-vivos que caminan cerca mío y me confunden porque ya no sé que quiero, porque ya no sé que pensar, porque ya no sé donde quiero estar.

Buenas noches 3.

A veces creo que soy demasiado egoista.

Pero Sh.

Buenas noches 2.

Me duele el corazón, el alma, mi infancia y los recuerdos.

Buenas noches.

Me estoy yendo a dormir. Perdoname si te pido demasiado. A veces me olvido que las cosas ya no son lo que eran y que ya no soy tu princesa, ni vos mi novio azul. Gracias igual por siempre intentar hacerme feliz. De verdad. Me gustaría que estuvieses acá ahora abrazandome, pero entendí que nuestras prioridades son distintas y prefiero darte tu espacio. Te amo, mi negrito lindo, con todo mi spm encima. Un beso.

Quiero poder volver a confiar en mi Super-novio y en sus super-poderes. A creer que siempre me va a sacar de todas esas situaciones que me hacen mal en sus brazos, volando.
Cada vez que estoy hormonal y sentimentalmente inestable pienso más de lo que siento y me paso de rosca. Y estos días lo necesito más que nunca y pienso (y también siento) que no está realmente ahí y ya no sé. Ya no sé si es que no tira conmigo o si soy yo que no lo veo igual.

¿Alguien le dice que lo extraño un poquito?

One more time.

Figurita repetida. Llega este Domingo que es de todo menos "del Padre". 

Domingo de mierda, remate de una semana colmada de imágenes de niños felices y padres amorosos en gigantografías por toda la ciudad. De una semana donde no hago más que reprocharme culpas que no son mías, de hacerme cargo (para variar) de problemas familiares que no tienen raíz en mí.

Quisiera poder sacarme esta mochila del orto. Sacarme estas culpas. Sacarme todos los recuerdos feos de encima y de ahogar mi paciencia para dejar de esperar cosas que no son y que ya sé que jamás serán.-

Hoy pienso.

Y aunque la que está en el pozo ahora soy yo, te grito desde adentro que estés bien, que vos podés, que vos querés. Y vos corrés en la superficie, reís en la superficie, y yo tonta y tiernamente, estúpida y heroicamente te aplaudo ritmos desde el pozo, mientras la tierra se me viene encima y la superficie casi me olvida y me voy haciendo nada. Ya nada para vos, nada más para cualquiera. Y vos te me vas yendo, pero corriendo, pero riendo con la sonrisa que siembre quise ver.
Ahora yo soy silencio y vos la risa que siempre intenté proteger.

Despacito.

Pero andate a la puta madre que te parió, corazón.

Cosas de amor y cosas varias.

• Lo único bueno de la mariconitis es que mi novio me la saque a besos.
• Que L me diga que me abrigue a la mañana porque va a hacer mucho frío me llena de ternura el corazón.
• Quiero que me regalen chocolates por los siglos de los siglos.
• Tengo la boca abierta desde que llegué a mi casa y no puedo parar de sorprenderme de lo que me dicen.

Amo amar.

Cuando llegué a casa le mandé un mensaje a L diciendo lo triste que estaba por la crueldad de la gente y me llamó para que me saque los pajaritos negros de la cabeza y pueda dormir feliz. Y no podía sonreir más fuerte cuando lo escuché. Y no puedo sonreir más fuerte pensando en esa capacidad que tiene para querer siempre cuidarme :)

Odio odiar.

No me gusta que la gente me caiga mal. Me fastidia gastar energía en eso. Odio odiar, es redundante, pero el odio me parece el sentimiento más inútil y sin sentido de todos. Lo detesto.
Y ahora ella me cae mal. Y no me gusta que me caiga mal. Y detesto que sea culpa de Él por no manejar bien las cosas. Y detesto gastar energía en pensar mal de ella, me parece tan innecesario, tan tonto, tan odioso.
Y me fastidia de maneras inimaginables saber que esto va a seguir siempre así como el orto. Así, ciclícamente un derroche continúo de energía.

Confusiones de invierno.

Tener ataques de amor y ataques de cagaste-todo.

Desigualdades, injusticias y nudos en la garganta.

Desde que sali de mi casa a la una y media de la tarde que la crueldad de la gente no deja de lastimarme. Llego recién ahora y se me caen las lágrimas. Estuve todo el día con ganas de pararme, de gritar, de denunciar esta realidad del orto que azota a tanta gente, que es tan injusta y tan de mierda. Con ganas de sacudir a la gente, sacudirle la cabeza, las ideas, abrirle los ojos. Gritar, gritarles. Tengo el corazón roto por esta sociedad egoísta que lo único que hace es mirar para dentro de su propio estrato (y sin siquierar mirar tanto) y no ve que pasa abajo, más abajo de abajo y allá dónde ni siquiera es más abajo, dónde es la nada. Allá dónde nos necesitan más que en ningún lado. Dónde te escuchan, dónde los nenes te dicen seño, dónde te ceban un mate, dónde te hacen sentir persona. Y también ahí dónde la exclusión los lleva al límite, dónde pueden robarte, dónde se drogan, dónde no tienen sueños, ni esperanzas.
Y se me caen las lágrimas de impotencia, de sentir que mi esfuerzo y el de tantos otros no alcanza. Y se me caen las lágrimas y no dejo de pensar en todos los que no tienen dónde dormir hoy, con que taparse o que cenar. Pienso en el frío que tenía mientras venía en el tren, viendo tanta injusticia, con un nudo en la garganta, abrigada; y pienso en ese nene en remera y descalzo, en ese señor en camisa. Y sigo sin querer entender nada.

El regreso de los muertos vivos.

¿Cuántas posibilidades en un millón hay de que te cruces a tu ex en el tren a las 23:20 de la noche el día de su cumpleaños con -2° de temperatura? Yo hubiese apostado que muy pocas, pero aparentemente lo nombras tres veces y aparece.

Ouch.

Demonios Batman-

Bati-dora.

Tengo una mezcla de colores adentro que me hace sonreir fuerte.

Sí.

Escribí y borré esta entrada como cuatro veces. Primero escribí sobre más fantasmas. Sobre gente que lleva y trae cosas que realmente no me interesan escuchar. Intenté cambiarlo, pero todas las palabras me llevaban a eso, ligadas al miedo de perder de nuevo, a las ganas de correr y treparme en el árbol más alto dónde nadie pueda lastimarme.
Y después aparece con toda esa seguridad que no sé cómo le sale y así, de a ratos confundida y aturdida, confío. Confío, creo y apuesto.

Corazón con agujeritos.

¿Cómo le explico que tengo el corazón roto y que me estoy arrastrando a la torre más alta?





(How can you look at me, as if i was just another one of your deals?)